Se abre una clínica de un doctor que trae técnicas novedosas para restaurar la virginidad en las mujeres, la cual causa mucho revuelo entre las damas que necesitan recuperar lo que no vuelve. La clínica se patrocina con un spot publicitario muy llamativo ” virginidad al alcance de su presupuesto”
Atraida por el anuncio llega una joven, pero no tanto y se presenta con el doctor:
- Hola doctor , necesito que me restaure la virginidad, ya que me voy a casar y le había dicho a mi novio que soy casta y pura, lo cual no es cierto del todo desde hace mucho tiempo. Su anuncio dice que la operación esta al alcance de mi presupuesto y espero que me la haga valida.
A lo que extrañado le pregunta el doctor:
- Y exactamente ¿de cuanto estamos hablando que es su presupuesto?
- Y exactamente ¿de cuanto estamos hablando que es su presupuesto?
- Es de cien pesos doctor .
El doctor se queda pensativo , pues no puede quedar mal por culpa de su publicidad y después de un rato se decide:
- Esta bien , tengo un plan justo para usted, pase por aquí para intervenirla de inmediato.
La señora se recuesta en una cama y después de diez minutos el doctor termina de intervenirla.
Como a las dos semanas llega de nuevo la mujer furiosa con el doctor y le reclama:
- ¿Que me hizo doctor? En la noche de bodas mi marido no podía penetrarme, me dolía peor que si fuera la virginidad original, y cuando por fin me pudo penetrar sentí que algo se rasgó y se sintió espantoso.
Yy el doctor sonriendo le contesta:
- ¿y por cien pesos que esperaba? tan solo le amarré los pelos.
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